Querido papá, Danielle Steel

TÍTULO: QUERIDO PAPÁ

TÍTULO ORIGINAL: DADDY

AUTORA: DANIELLE STEEL

El mundo alrededor de Oliver Watson parece disolverse cuando Sarah, su esposa durante dieciocho años, regresa a Harvard para graduarse. Oliver es abandonado a su suerte, con tres hijos y una libertad que jamás deseó. Cuando la madre de Oliver muere, su padre también ha cambiado: mas osado que su hijo y con menos tiempo por vivir, George Watson, a sus setenta y dos años, pronto reencontrará el amor y, eventualmente, un nuevo matrimonio.

Ben, el hijo mayor de Oliver, rechaza a su padre, decidido a forjarse su propia educación. Melissa, la hija mediana, culpa a Oliver por la partida de su madre. Y Sam, el benjamín, se encuentra demasiado afectado como para soportarlo. A partir de ahora, será papá quien deba lidiar con nuevas responsabilidades, nuevas mujeres, nuevas experiencias. Nada es como antes, nada es como ellos creyeron alguna vez que seria. Pero finalmente lo diferente es mejor...

(Sinopsis y portada

de la edición publicada por

Círculo de lectores)

OPINIÓN PERSONAL

No está mal para pasar el rato, pero es totalmente olvidable. No recuerdo quién me dio este libro, si no me equivoco, fue una vecina que se iba a mudar y me entregó varios títulos. Eso sí, tuvo que ser hace muchísimo tiempo porque no estoy segura. Lo que tengo claro es que no lo compré, ya que Danielle Steel no es de esas autoras que me llaman la atención. He leído alguna que otra obra de ella y nunca he acabado excesivamente entusiasmada, así que... ¿por qué le di entonces una oportunidad a ésta? Pues porque mis estanterías están al borde del colapso y quise comprobar si éste me gustaba o no para poder decidir si me quedaba con el ejemplar que tenía o si lo donaba. Opción ganadora: donarlo a la biblioteca de mi ciudad. No ha sido un horror, más bien es que únicamente me ha servido como distracción. 

Primera advertencia: ignorad la sinopsis. Cuenta más de lo debido. A mí me da un poco igual, pero sé que a otras personas le pueden molestar los spoilers.

El protagonista de esta historia es Oliver, un hombre que consideraba que tenía la vida perfecta: una esposa que siempre estaba lista para mantener la casa en orden y cuidar de sus tres hijos, un buen puesto de trabajo, ninguna preocupación relevante, estabilidad económica y dinero suficiente para darse cualquier capricho. Sin embargo, su mundo se tambalea cuando Sarah, su esposa, decide volver a estudiar. Sí, ya lo veis, un pecado mortal (es ironía, por si alguien tiene dudas). El hecho de que ninguno sepa gestionar el tema provocará que Oliver se vea obligado a afrontar numerosos cambios...

Las primeras páginas están dedicadas a mostrar cómo fue la relación de Sarah y Oliver desde que se conocieron hasta la actualidad. Inicialmente, no le vi importancia, pero luego entendí que lo que se cuenta ahí es clave para comprender la sensación de asfixia que Sarah sentía en su día a día. Aunque se nota que ella amaba a Oliver, en verdad, casarse muy joven y quedarse embarazada pronto fue lo que, sin darse cuenta, la hizo ir aplazando lo de perseguir sus propios sueños. 

En la actualidad, uno de sus hijos ya está a punto de ir a la universidad, la otra es una adolescente y el más pequeño tiene casi 10 años. Retomar sus estudios supondría abandonar su casa durante la semana para poder estar cerca de la universidad, pero su intención es volver todos los fines de semana y durante las vacaciones. La incomprensión de Oliver y la forma en la que ella se autoengaña a sí misma con sus planes es lo que desembocará en una crisis en el matrimonio. 

El libro se publicó originalmente en 1989 y eso se percibe a la hora de desarrollar varios aspectos. Hay machismo y pensamientos que, aunque se sigan dando todavía, eran más frecuentes hace un par de décadas. El aborto está tratado como algo sucio y solo parece ser correcto si el embarazo se da fuera del matrimonio, la mujer es más criticada si antepone sus deseos personales a los de su marido, el hombre puede rehacer su vida en un abrir y cerrar de ojos, pero ella queda como una descarada si hace lo mismo... en resumen, no es la novela más progresista con la que os vais a topar. No estoy justificando esto, pero creo que es importante tenerlo en cuenta a la hora de leerlo. Yo no estoy a favor de censurar ninguna obra solo porque tenga afirmaciones que hoy en día estén desfasadas, creo que cada cual debe de ser capaz de analizar lo que lee y ponerlo en contexto. 

Sarah es prácticamente insultada y tachada de loca por querer regresar a la universidad. Creedme, da rabia ver el drama que se monta con su decisión. Oliver se porta como una víctima y, para justificar sus ataques, luego la autora se encarga de ir destrozando al personaje de Sarah haciendo que parezca que él siempre tuvo razón. No voy a dar más detalles para evitar spoilers, así que os lo resumiré diciendo que Sarah no sabe manejar el asunto y da la impresión de ser cruel con sus propios hijos. 

Si me preguntáis el objetivo de la novela, os diré que no tiene ninguno. Es ver a cada personaje volver a encauzar su vida y soportar que los hombres de esta historia lloriqueen si no tienen una mujer a su lado.

No hay evolución propiamente dicha de los personajes, más bien se deben adaptar a las circunstancias y ya está. 

Oliver como padre es intachable, eso no se lo voy a negar. Siempre los apoya, intenta estar para ellos y jamás intenta volverlos en contra de Sarah. En ese sentido, el título es adecuado porque se sabe ganar el aprecio de sus hijos y es agradable ver cómo intenta ayudarlos a superar sus malos momentos. Como hombre, funciona mejor como amigo que en sus relaciones amorosas. El tinte machista nunca se pierde. Aunque se intente maquillar, está más que claro que, a nivel de pareja, él no ve bien que una mujer anteponga cualquier deseo personal a lo que es el día a día de un hogar. 

Todo lo de Sarah es el detonante, pero eso solo abarca el primer tercio del libro. Posteriormente, hay nuevas relaciones, retos inesperados para uno de los hijos de Oliver y para su padre, cambios laborales para Oliver... vamos, que sí que van pasando diversas cosas. La lectura es amena y no es de reflexiones interiores, lo que predomina es ver cómo todos los personajes van aceptando los nuevos eventos que se van dando en su vida y saber si se mantendrán unidos a pesar de todo. Es como la típica película que logra engancharte y no sabes por qué. 

Las relaciones familiares, más allá de la insistencia de que una mujer debe de ser la pieza crucial, pues no están mal tratadas. Lo que más chirría es que todo se da en un contexto temporal relativamente breve y por eso cuesta creerse algunas cosas. En total, la historia abarca lo ocurrido en dos años (siendo la marcha de Sarah el auténtico punto de partida). Debido a eso, más de una vez me quedé asombrada con lo sencillo que era para los personajes enamorarse, desenamorarse, aceptar la llegada de nuevas personas a su día a día y superar la pérdida de otras. No se forjan bien los nuevos vínculos y cuesta aceptar que algunos se vuelvan tan dependientes de otros. Me da que las prisas le jugaron en contra a la autora y no logró hacer creíble el tema de los sentimientos.

Además, y me pregunto si esto no fue a propósito, se dan incoherencias en la forma de pensar de Oliver. En más de una ocasión, él defiende determinados asuntos si le afectan directamente a sí mismo, pero luego tiene una actitud completamente diferente cuando se trata de otros. Es raro, aunque podría ser una manera de analizar que no nos comportamos igual si algo le afecta a otros en vez de a nosotros. La cuestión es que no queda muy claro y por eso no me convenció. 

El desenlace admito que no fue el que esperaba en un principio, pero tampoco fue nada que me impresionara demasiado. Es el resultado de todo lo que ha ido sucediendo y lo más triste es ver que Oliver no aprendió a evolucionar a la hora de plantearse ciertos temas.

Como no me aburrió, le voy a dar una aprobado, que es la nota que le doy a cualquier libro que, como mínimo, me entretenga. Si ya conocéis el estilo de la autora y os gusta, pues tal vez os deje mejor impresión que a mí.

Valoración del libro: 5,5/10 "Aceptable como pasatiempo, pero cuestionable por su forma de tratar determinados temas. Hay machismo, aunque veo importante tener en cuenta cuándo fue publicado el libro (1989). Además, doy por hecho que la mayoría de lectores sabrá detectar lo incorrecto de determinados pensamientos. La historia se centra en los cambios a los que el protagonista debe de hacer frente tras una decisión de su esposa. El título le viene bien a la obra porque lo que mejor tratado está son los vínculos que él tiene con sus hijos. La lectura es amena y se van dando diversos acontecimientos, pero no tiene nada de especial". 

Adaptación cinematográfica

Estrenada en 1991, fue una película que se emitió directamente en televisión. Según su ficha en IMDb, dura 1 hora y 40 minutos y cuenta con Patrick Duffy en el papel de Oliver. Lo que más me ha sorprendido ver es que Ben Affleck participó en ella interpretando a uno de los hijos de Oliver. 

Personalmente, descubrí por casualidad la existencia de la película, ya que estaba buscando otras portadas del libro y me salió el póster de la adaptación. No tengo intenciones de verla, pero tampoco la descarto si alguna vez me llego a topar con ella en la televisión. 

Si alguien la ha visto y quiere compartir su opinión, estaré encantada de conocerla :)

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