TÍTULO: LA CRUZ DE MORRIGAN
TÍTULO ORIGINAL: MORRIGAN'S CROSS
TRILOGÍA "EL CÍRCULO": 1º PARTE
AUTORA: NORA ROBERTS
Hoyt Mac Cionaoith recibe la visita de la diosa Morrigan, quien le encarga la misión de salvar al mundo de la diabólica vampira Lilith, un ser oscuro responsable de la desaparición del hermano de Hoyt.
La diosa Morrigan confiere a Hoyt de poderes y le insta a formar un círculo de seis lo suficientemente sólido como para derrotar a Lilith.
El joven deberá viajar a través del tiempo con el fin de localizar a los otro cinco componentes del círculo: su hermano, una bruja, un guerrero, un sabio y un ser que adopta muchas formas.
Estos seis desconocidos deberán enfrentarse a continuos peligros que desembocarán en una apoteósica batalla en la que está en juego el destino de la humanidad.
Estos seis desconocidos deberán enfrentarse a continuos peligros que desembocarán en una apoteósica batalla en la que está en juego el destino de la humanidad.
(Fuente: Planeta de libros Ficha completa aquí)
OPINIÓN PERSONAL
Aunque ninguno de los libros que he leído de Nora Roberts me ha fascinado, no puedo negar que sigo leyendo obras suyas porque las sinopsis me tientan y ya voy con la idea de que me conformaré con que sean lecturas entretenidas. "La cruz de Morrigan" es el primer libro de la trilogía "El círculo" y me llamó la atención por el tema de los vampiros y las brujas (últimamente siento especial curiosidad por romances paranormales...). Una vez leído, debo decir que por momentos fue tan aburrido que hasta me planteé abandonarlo, pero en otros instantes fue increíblemente entretenido y solo por un personaje llamado Cian ha valido la pena leerlo.
Las primeras páginas nos sitúan en el siglo XII y nos muestran a Hoyt, un hombre que es un hechicero, luchando contra Lilith, una poderosa vampira que había acabado con la vida de Cian, hermano de Hoyt. Lilith no es una rival débil, así que sale prácticamente indemne de su lucha con Hoyt. Triste por la pérdida de su hermano, Hoyt no se permite a sí mismo derrumbarse y menos cuando la diosa Morrigan se le aparece y le comunica que debe viajar al futuro para formar un pequeño grupo cuyo objetivo será acabar con Lilith para evitar que ella se haga con el control del mundo, acabe con la raza humana... vamos, lo típico de cualquier apocalipsis. Tras abandonar su época, Hoyt llega a Nueva York y se encuentra nada más y nada menos que con Cian, quien ahora es un vampiro de 900 años. Cian es una pieza clave en la lucha contra Lilith, pero Hoyt teme que en verdad no esté interesado en derrotarla. Pronto se unirá a ellos Glenna, una bruja de nuestra época que tiene una conexión instantánea con Hoyt...
Os tengo que ser sincera... me aburría bastante con esta parte. Cian era el único que me intrigó desde su primera aparición. Es un tío carismático y me agradó que, pese a tener ciertas diferencias con Hoyt, no perdiera el tiempo en disputas inútiles ni se comportara como un crío. Hoyt es más de esos que quieren salvar el mundo y que son cansinos por su actitud sufridora en determinados instantes.
Además, el instalove entre él y Glenna no me gustó, se conocieron de un modo peculiar y luego ya se dio una atracción sin fundamento. Lo que tienen en común son lo pesados que pueden resultar por su creencia de que ellos son los que saben lo que está bien y lo que está mal.
Yo no sabía ni qué cara poner cuando hablaban de que lo suyo era un amor épico, no sentí absolutamente nada con su romance e incluso me daba rabia lo precipitados que fueron determinados hechos y la incapacidad de ambos para hablar seriamente de temas en los que su opinión era muy diferente (tengamos en cuenta que él es un hombre del siglo XII y ella una mujer del siglo XXI, no es que él la quiera anular como persona ni que sea malo, pero no me dio la impresión de que realmente entendiera algunas cosas que ella le explicaba).
Puesto que del romance no tengo prácticamente nada bueno que decir, voy a hablar de aspectos de la trama que sí me gustaron:
- La amistad entre Cian y King: Cian tiene un club nocturno y King es un humano que trabaja allí. Cuando Hoyt llega y cuenta lo de se que tienen que ir a Irlanda para preparar su batalla contra Lilith, King se empeña en ir a luchar él también. King sabe que Cian es un vampiro y muestra una lealtad inquebrantable hacia él, cosa que me resultaba interesante. Cuando se contó cómo se cruzaron sus vidas y la relación fraternal que desarrollaron a pesar del comportamiento distante que Cian tenía y sigue teniendo, vi tierna su camaradería. Aunque la atención no está centrada en esta amistad, lo poco que se muestra de ella me pareció enternecedor y más aún cuando se da un giro en los acontecimientos y uno de los dos debe hacer algo que le dolerá más de lo que quiere dar a entender...
- El aumento de la acción después de la mitad: en la primera mitad de la novela no se dan demasiados sucesos, al ser una trilogía, es obvio que la gran batalla no se dará en este libro, así que la autora pierde bastante el tiempo con Hoyt y Glenna preparando hechizos y con Cian entrenándoles ocasionalmente a ellos y a Larkin y Moira, dos personajes que aparecen cuando la historia está un poco avanzada y que también vienen del pasado. Casi ni vale la pena hablar de ellos, son simpáticos y claramente Moira está destinada a tener algo con Cian, pero aquí aportan lo justo. Como dice la sinopsis, son 6 los integrantes de este pequeño ejercito contra el mal, pero 3 están muy deslucidos (Larkin, Moira y... tenéis que descubrirlo). Después de la mitad, cuando ya tanta escena pasando el rato en la casa de Irlanda resulta agotadora, la trama adquiere un ritmo trepidante debido a que los personajes se ven obligados a luchar y a afrontar ataques inesperados de Lilith. No me esperaba algunas cosas y leía sin parar para ver cómo se iban a desarrollar los acontecimientos.
- Cian: Lo sé, es probable que esté un poco pesada con su personaje, pero cada aparición suya incrementaba rápidamente mi interés. Es maravilloso ese aire misterioso que tiene, su actitud chulesca pero no antipática, su capacidad para saber cómo actuar sin caer en dramatismos y cómo logra hacerles ver a los demás que no son tan poderosos como se creen.
Al parecer, "El valle del silencio", último libro de la trilogía, le tiene a él como protagonista, así que solo por él voy a hacer el esfuerzo monumental de leer el segundo. Puede que os preguntéis que si no tengo interés en la lucha con Lilith, así que os lo voy a aclarar...
Leyendo este libro, he visto similitudes con la trilogía de Los O'Dwyer (reseña de "Bruja oscura", primer libro, aquí), también escrita por Nora Roberts. No es que las historias sean iguales, pero veo que siguen más o menos el mismo patrón: desconocidos que se unen para luchar contra el mal, algunos con lazos familiares que les unen, ser malvado que les amenaza y que, sin embargo, aparece en contadas ocasiones, mucho tiempo entrenándose de un modo cuestionable (salvo los entrenamientos físicos con Cian, lo de la magia se trata de una manera pobre, es principalmente recitar frasesitas y ya puedes hacer de todo, no se hace que parezca algo especial) y un personaje carismático cuyo protagonismo queda reservado para el último libro (en la trilogía de los O`Dwyer se trataba de Fin, pero espero que con Cian no me pase lo mismo que con él, ya que Fin no cumplió mis expectativas en su libro). Además, en esa trilogía noté que Nora Roberts no quería arriesgar y me temo que aquí pasará lo mismo. No me hago ilusiones pensando que la batalla final será espectacular porque en los O'Dwyer vi cómo algo que llevaba gestándose durante tres libros acabó a la prisa y de un modo insulso. Espero equivocarme, pero lo dudo.
No penséis que "La cruz de Morrigan" es horrible, sencillamente es que tenía potencial para más y se podría haber desarrollado mejor tanto el romance como la parte de la magia.
Ya tengo las siguientes partes de la trilogía, así que las leeré pronto y añadiré aquí los enlaces a las reseñas:
Valoración del libro: 5,5/10 "Una historia que va mejorando a medida que avanza, aunque nunca llega a resultar fascinante. La parte de romance es simple y apresurada, no logró hacerme sentir prácticamente nada. Lo mejor del libro se da después de la mitad, momento en el cual aumenta la acción y ocurren algunas cosas ligeramente inesperadas. Hay un personaje que me gustó tanto que solo por él seguiré con la trilogía".
Todo lo expresado anteriormente es mi opinión, esto no significa que esté en contra de otros puntos de vista u otro tipo de opiniones. Si queréis preguntar algo o queréis dar vuestra valoración, no dudéis en dejar vuestro comentario, siempre que lo hagáis de modo respetuoso.
Las primeras páginas nos sitúan en el siglo XII y nos muestran a Hoyt, un hombre que es un hechicero, luchando contra Lilith, una poderosa vampira que había acabado con la vida de Cian, hermano de Hoyt. Lilith no es una rival débil, así que sale prácticamente indemne de su lucha con Hoyt. Triste por la pérdida de su hermano, Hoyt no se permite a sí mismo derrumbarse y menos cuando la diosa Morrigan se le aparece y le comunica que debe viajar al futuro para formar un pequeño grupo cuyo objetivo será acabar con Lilith para evitar que ella se haga con el control del mundo, acabe con la raza humana... vamos, lo típico de cualquier apocalipsis. Tras abandonar su época, Hoyt llega a Nueva York y se encuentra nada más y nada menos que con Cian, quien ahora es un vampiro de 900 años. Cian es una pieza clave en la lucha contra Lilith, pero Hoyt teme que en verdad no esté interesado en derrotarla. Pronto se unirá a ellos Glenna, una bruja de nuestra época que tiene una conexión instantánea con Hoyt...
Os tengo que ser sincera... me aburría bastante con esta parte. Cian era el único que me intrigó desde su primera aparición. Es un tío carismático y me agradó que, pese a tener ciertas diferencias con Hoyt, no perdiera el tiempo en disputas inútiles ni se comportara como un crío. Hoyt es más de esos que quieren salvar el mundo y que son cansinos por su actitud sufridora en determinados instantes.
Además, el instalove entre él y Glenna no me gustó, se conocieron de un modo peculiar y luego ya se dio una atracción sin fundamento. Lo que tienen en común son lo pesados que pueden resultar por su creencia de que ellos son los que saben lo que está bien y lo que está mal.
Yo no sabía ni qué cara poner cuando hablaban de que lo suyo era un amor épico, no sentí absolutamente nada con su romance e incluso me daba rabia lo precipitados que fueron determinados hechos y la incapacidad de ambos para hablar seriamente de temas en los que su opinión era muy diferente (tengamos en cuenta que él es un hombre del siglo XII y ella una mujer del siglo XXI, no es que él la quiera anular como persona ni que sea malo, pero no me dio la impresión de que realmente entendiera algunas cosas que ella le explicaba).
Puesto que del romance no tengo prácticamente nada bueno que decir, voy a hablar de aspectos de la trama que sí me gustaron:
- La amistad entre Cian y King: Cian tiene un club nocturno y King es un humano que trabaja allí. Cuando Hoyt llega y cuenta lo de se que tienen que ir a Irlanda para preparar su batalla contra Lilith, King se empeña en ir a luchar él también. King sabe que Cian es un vampiro y muestra una lealtad inquebrantable hacia él, cosa que me resultaba interesante. Cuando se contó cómo se cruzaron sus vidas y la relación fraternal que desarrollaron a pesar del comportamiento distante que Cian tenía y sigue teniendo, vi tierna su camaradería. Aunque la atención no está centrada en esta amistad, lo poco que se muestra de ella me pareció enternecedor y más aún cuando se da un giro en los acontecimientos y uno de los dos debe hacer algo que le dolerá más de lo que quiere dar a entender...
- El aumento de la acción después de la mitad: en la primera mitad de la novela no se dan demasiados sucesos, al ser una trilogía, es obvio que la gran batalla no se dará en este libro, así que la autora pierde bastante el tiempo con Hoyt y Glenna preparando hechizos y con Cian entrenándoles ocasionalmente a ellos y a Larkin y Moira, dos personajes que aparecen cuando la historia está un poco avanzada y que también vienen del pasado. Casi ni vale la pena hablar de ellos, son simpáticos y claramente Moira está destinada a tener algo con Cian, pero aquí aportan lo justo. Como dice la sinopsis, son 6 los integrantes de este pequeño ejercito contra el mal, pero 3 están muy deslucidos (Larkin, Moira y... tenéis que descubrirlo). Después de la mitad, cuando ya tanta escena pasando el rato en la casa de Irlanda resulta agotadora, la trama adquiere un ritmo trepidante debido a que los personajes se ven obligados a luchar y a afrontar ataques inesperados de Lilith. No me esperaba algunas cosas y leía sin parar para ver cómo se iban a desarrollar los acontecimientos.
- Cian: Lo sé, es probable que esté un poco pesada con su personaje, pero cada aparición suya incrementaba rápidamente mi interés. Es maravilloso ese aire misterioso que tiene, su actitud chulesca pero no antipática, su capacidad para saber cómo actuar sin caer en dramatismos y cómo logra hacerles ver a los demás que no son tan poderosos como se creen.
Al parecer, "El valle del silencio", último libro de la trilogía, le tiene a él como protagonista, así que solo por él voy a hacer el esfuerzo monumental de leer el segundo. Puede que os preguntéis que si no tengo interés en la lucha con Lilith, así que os lo voy a aclarar...
Leyendo este libro, he visto similitudes con la trilogía de Los O'Dwyer (reseña de "Bruja oscura", primer libro, aquí), también escrita por Nora Roberts. No es que las historias sean iguales, pero veo que siguen más o menos el mismo patrón: desconocidos que se unen para luchar contra el mal, algunos con lazos familiares que les unen, ser malvado que les amenaza y que, sin embargo, aparece en contadas ocasiones, mucho tiempo entrenándose de un modo cuestionable (salvo los entrenamientos físicos con Cian, lo de la magia se trata de una manera pobre, es principalmente recitar frasesitas y ya puedes hacer de todo, no se hace que parezca algo especial) y un personaje carismático cuyo protagonismo queda reservado para el último libro (en la trilogía de los O`Dwyer se trataba de Fin, pero espero que con Cian no me pase lo mismo que con él, ya que Fin no cumplió mis expectativas en su libro). Además, en esa trilogía noté que Nora Roberts no quería arriesgar y me temo que aquí pasará lo mismo. No me hago ilusiones pensando que la batalla final será espectacular porque en los O'Dwyer vi cómo algo que llevaba gestándose durante tres libros acabó a la prisa y de un modo insulso. Espero equivocarme, pero lo dudo.
No penséis que "La cruz de Morrigan" es horrible, sencillamente es que tenía potencial para más y se podría haber desarrollado mejor tanto el romance como la parte de la magia.
Ya tengo las siguientes partes de la trilogía, así que las leeré pronto y añadiré aquí los enlaces a las reseñas:
Valoración del libro: 5,5/10 "Una historia que va mejorando a medida que avanza, aunque nunca llega a resultar fascinante. La parte de romance es simple y apresurada, no logró hacerme sentir prácticamente nada. Lo mejor del libro se da después de la mitad, momento en el cual aumenta la acción y ocurren algunas cosas ligeramente inesperadas. Hay un personaje que me gustó tanto que solo por él seguiré con la trilogía".
Todo lo expresado anteriormente es mi opinión, esto no significa que esté en contra de otros puntos de vista u otro tipo de opiniones. Si queréis preguntar algo o queréis dar vuestra valoración, no dudéis en dejar vuestro comentario, siempre que lo hagáis de modo respetuoso.