TÍTULO: EL CASO ALASKA SANDERS
TÍTULO ORIGINAL: L'AFFAIRE ALASKA SANDERS
SAGA MARCUS GOLDMAN #3
(ES EL 3º EN ORDEN DE PUBLICACIÓN, PERO CRONOLÓGICAMENTE EN LA HISTORIA SERÍA EL 2º, YA QUE LOS SUCESOS NARRADOS SON POSTERIORES AL PRIMER LIBRO Y ANTERIORES AL 3º)
AUTOR: JOËL DICKER
«Sé lo que has hecho». Este mensaje, encontrado en el bolsillo del pantalón de Alaska Sanders, cuyo cadáver apareció el 3 de abril de 1999 al borde del lago de Mount Pleasant, una pequeña localidad de New Hampshire, es la clave de la nueva y apasionante investigación que, once años después de poner entre rejas a sus presuntos culpables, vuelve a reunir al escritor Marcus Goldman y al sargento Perry Gahalowood.
En esta ocasión contarán con la inestimable ayuda de una joven agente de policía, Lauren Donovan, empeñada en resolver la trama de secretos que se esconde tras el caso.
A medida que vayan descubriendo quién era realmente Alaska Sanders, irán resurgiendo también los fantasmas del pasado y, entre ellos, especialmente el de Harry Quebert.
(Sinopsis y portada de la edición publicada
por el sello editorial Alfaguara,
perteneciente a Penguin Random House)
OPINIÓN PERSONAL
No es ni el mejor ni el peor libro de Joël Dicker. Volver a reencontrarme con Marcus Goldman como protagonista me generaba ciertos temores, pero admito que lo de promocionar esta novela mencionando que Harry Quebert iba a tener presencia consiguió cegarme. Tenía tantas ganas de saber qué fue de él que por eso no dudé en gastarme los 22 eurazos que costaba esta obra (vale, he tardado meses en leerla , pero es que yo rara vez me leo un libro inmediatamente después de comprarlo xD). Amé con toda mi alma "La verdad sobre el caso Harry Quebert" (reseña aquí), pero "El libro de los Baltimore" (reseña aquí) me pareció insulso y prescindible, por eso tenía ciertas reticencias a la hora de lanzarme con"El caso Alaska Sanders". Finalmente, debo decir que no me ha disgustado, aunque no puedo negar que me ha dejado una sensación agridulce. Desde mi punto de vista, el de Quebert era insuperable, pero aquí esperaba algo más.
En el momento de publicar esta reseña, la saga protagonizada por Marcus Goldman está compuesta por 3 libros. "El caso Alaska Sanders" es el 3º en orden de publicación. Sin embargo, si lo que tenemos en cuenta es el orden cronológico de la historia, éste sería el 2º. Aquí nos reencontramos con Marcus en 2010, 2 años después de todo lo que ocurrió en "La verdad sobre el caso Harry Quebert", y acabamos la lectura justo cuando Marcus se encamina a reflexionar sobre los hechos que narrará en "El libro de los Baltimore".
¿Se puede leer "El caso Alaska Sanders" sin haber leído los otros dos? Más o menos. No pasa nada si no habéis leído "El libro de los Baltimore" porque, aunque se hacen menciones sobre lo que se contará en ése, se juega mucho con el secretismo y las frases misteriosas, así que realmente no se dice nada que pueda ser considerado spoiler. Respecto a "La verdad sobre el caso Harry Quebert", pues el asunto es más complejo. No se detalla exactamente lo que ocurrió en ése ni cuál fue la resolución del caso, pero sí que, solo por la presencia de ciertos personajes, podréis intuir cosas. Por tanto, es mejor que lo leáis antes de lanzaros con éste. Para mí, Dicker quiso hacer esta obra para reparar los errores de "El libro de los Baltimore". Ahí Marcus parecía que tenía problemas de memoria porque no hacía ni una sola mención a lo sucedido en el libro de Quebert, algo totalmente ilógico (lo que Marcus vivió le marcó personal y profesionalmente, así que era chocante que no hiciera ni un misero comentario casual sobre ese asunto). Lo malo es que, crear este libro-puente, le ha quedado raro en ese aspecto. Aquí hace un número considerable de referencias a los personajes de los Baltimore, y es extraño que, de repente, le importe tanto gente que nunca salió mencionada en el libro de Quebert. Y nombrar a Quebert ahora para arreglar lo de haberlo omitido en el otro... pues es cuestionable. Solo diré que yo vi muy decepcionante el gran "regreso" de ese personaje (es apenas un cameo y no brilla).
Dejo de irme por las ramas porque tampoco quiero desvelar más de la cuenta. Ahora por fin voy a centrarme en lo que ocurre en "El caso Alaska Sanders". Siento haberme extendido con todo lo dicho anteriormente, pero eran detalles que quería aclarar correctamente.
Corría el año 1999 en la tranquila localidad de Mount Pleaseant, un lugar en la que, aparentemente, nunca pasaba nada verdaderamente importante. Alaska Sanders era una joven que trabajaba en una gasolinera y que parecía haber abandonado sus aspiraciones de ser una gran actriz para asentarse allí junto a su pareja. Un día como cualquier otro, tras acabar su turno de trabajo, le dijo a su jefe que se iba a una cita romántica, pero la siguiente vez que la vieron fue cuando se encontró su cadáver en la orilla de un lago cercano.
Rápidamente, la policía pareció dar con los culpables, pero 11 años más tarde descubriremos que la investigación no se desarrolló de manera adecuada y que puede que nunca se hiciera justicia...
Alternando pasado y presente, nos sumergiremos en los acontecimientos de 1999 y, al mismo tiempo, acompañaremos a Marcus y al sargento Perry mientras intentar hallar la verdad y comprobar si realmente no se hicieron bien las cosas.
Perry fue uno de los agentes que participó en la investigación de 1999, por lo que el hecho de haber podido hacer mal su trabajo lo atormenta. Poco a poco, nos irá contando que ese caso le dejó una huella imborrable por algo trágico que acabó marcando su carrera. A nivel personal, Perry tampoco pasa por un buen momento en su matrimonio, pero lo que no espera es que eso también pueda tener cierta conexión con lo ocurrido en 1999. En cuanto a Marcus, él sigue disfrutando de las mieles del éxito y ha dejado atrás sus crisis como escritor. Lo que no se atreve a confesar es que se siente solo a pesar de tenerlo todo. Por eso, cuando una serie de acontecimientos le llevan a meterse en el tema de Alaska Sanders, Marcus no duda en volver a unirse a Perry para ejercer de detective.
El equipo que forman Perry y Marcus es lo mejor de esta novela. Son amigos, pero también grandes compañeros. Acompañarlos en sus pesquisas es agradable, especialmente por lo bien que se complementan y porque ninguno eclipsa al otro. Se entienden a la perfección, tienen buenos momentos de humor y saben apoyarse a nivel personal, aunque aquí también les vemos sus miedos a la hora de afrontar determinadas verdades. Sus dramas personales les provocan bajones que no quieren mostrar por temor a parecer débiles, por lo que es hasta bonito ir viendo cómo evoluciona su amistad y cómo se refuerza la lealtad que se tienen.
El ritmo de la narración no es malo, pero tampoco es increíblemente trepidante. A ver, yo leía y no me aburría, pero no sentía unas ansias locas de querer seguir pasando las páginas.
Me gusta que Dicker tenga una escritura elegante y cuidada, sin florituras innecesarias y conservando un tono cercano. Ése es uno de sus grandes puntos fuertes y es lo que permite que la lectura sea disfrutable (en el sentido de que no es engorrosa ni cargante). Lo que falla es el argumento/trama. Son 586 páginas y podrían haber sido 100-200 menos, ya que le damos muchas vueltas a los mismos aspectos. Más de una vez da la impresión de que ya tenemos todas las piezas del puzzle y que lo que falta es encajarlas del modo correcto. Y no, no estoy diciendo que el libro sea predecible. Hay datos que veo imposible que se puedan intuir porque los personajes implicados saben guardar muy bien sus secretos hasta el último segundo, pero si no fuera por testigos de última hora o por instantes en los que a más de uno le da por abrir la boca y contar lo que anteriormente omitió, hubiéramos sabido la verdad antes.
Hay varios pequeños giros argumentales que mantienen vivo el interés y, dentro de lo que cabe, Dicker sí que logra que todo quede bien atado para que ninguna revelación quede fuera de lugar o no tenga lógica. Aunque añoré un golpe de efecto mayor ante algunos descubrimientos y más adrenalina a la hora de ir atando cabos, reconozco que no se sacó de la manga ningún testimonio ni forzó la aparición de pruebas injustificadas.
Los personajes secundarios no son malos, realizan las aportaciones necesarias y no ejercen un papel meramente decorativo, pero carecen de carisma. Además, a casi todos hay que sacarles las palabras casi que a la fuerza, ya que no son muy dados a hablar. Y cuando lo hacen, tienden mucho a ir cambiando de versión. No me disgustaron, pero ninguno me generó un interés desmedido.
Como en otros de sus libros, Dicker juega mucho con la cara oculta de los habitantes de un sitio en el que no parece existir ninguna amenaza, lo cual no está mal porque te hace pensar en que detrás de una apariencia totalmente inofensiva y aburrida puede esconderse algo completamente distinto.
Las últimas 100 páginas son las que más ritmo tienen y son las que me leí de un tirón porque me gustó sentir que ahí estaba avanzando de verdad y que ya no estábamos con pistas repetidas.
Todo lo referente al caso Alaska Sanders queda resuelto. No quedan preguntas en el aire ni nada sin aclarar. Eso sí, independientemente de que tras éste toque leer "El libro de los Baltimore" (no, no pienso releerlo porque con sufrirlo una vez tuve suficiente), Dicker ya deja caer que está pensando en un 4º libro y siembra la semilla del caso que tocará investigar. Me gustaría decir, tras ver que éste no era la 8º maravilla que yo esperaba, me resistiré a ese futuro nuevo libro si lo llega a publicar, pero sé que no lo haré. No me disgustan los planteamientos de sus obras y le tengo cariño a Perry y a Marcus, así que acabaré cayendo en la tentación. Eso sí, probablemente esperaré a la edición en bolsillo porque muy bien me tiene que vender esa novela para que vuelta a pagar lo que pagué por ésta.
Resumiendo: una lectura que me ha parecido aceptable. Me faltó que me despertara más emoción y que le sacara más partido a ciertos detalles, pero no está mal. La cuestión es que no tiene nada de memorable ni especial.
Valoración del libro: 6,5/10 "Correcto y ameno, pero no inolvidable. No es una historia de las que se devoran, tiene alguna que otra sorpresa y mantiene el interés, pero le faltó chispa y no hacer tanto hincapié en los mismos datos. Eso sí, da gusto volver a ver a Marcus Goldman y al sargento Perry formar equipo, ya que estos dos saben despertar simpatía y se complementan bien como amigos y como investigadores. Centrándome en el caso en sí, debo decir que los mejores giros se dan al final. Con un poco más de agilidad en la investigación y sacándole más provecho a determinados aspectos, el libro hubiera ganado muchos puntos".
Todo lo expresado anteriormente es mi opinión, esto no significa que esté en contra de otros puntos de vista u otro tipo de opiniones. Si queréis preguntar algo o queréis dar vuestra valoración, no dudéis en dejar vuestro comentario, siempre que lo hagáis de modo respetuoso.
No me he animado con este autor aún. Y al paso que voy... Tengo tanto de este género pendiente que no sé por dónde empezar.
ResponderEliminarBesotes!!!
¡Hola, Margari! Pues con "La verdad sobre el caso Harry Quebert" sí que insistiría para que te animaras ^^ Engancha, tiene intriga y reflexiones muy buenas. En todo caso, te entiendo totalmente con lo de la lista enormes de lecturas pendientes porque yo estoy igual jajajajj ¡Saludos y gracias por comentar! ;-)
Eliminar¡Hola, Omaira! ^^
ResponderEliminarSí, doce millones de años después ¡vengo a ponerme al día! :) No sé cómo consigo siempre tener tantas cosas atrasadas, ay :( pero ¡vamos a ello!
Tenía muchas ganas de leer tu reseña de esta novela, más que nada porque después de lo muchisísisisimo que te gustó "La verdad sobre el caso Harry Quebert" quería - sí, quería - que adoraras esta novela y, claro, tía, la leí antes y vi que no era tan chachi, jo :( Empezando por el principio - para variar, porque las dos sabemos que siempre termino montando El Caos en los comentarios xD -, debo decir que es una pena que esta novela no sea tan guay como lo fue el libro de Quebert. Quiero decir: el caso tenía mucho potencial. Alaska llamaba mucho la atención y, jolín, ¡hubiera sido tan guay que molara! Ya sabes que paso de leerme "El libro de los Baltimore" - entre otras cosas, por todo lo que me has hablado de él: no tengo tiempo para leer cosas aburridas, sorry not sorry jajajajaja -, así que ahí no entro, pero, tía, me ha encantado lo de que rara vez te lees un libro tal cual lo compras, ¡me sumo totalmente! Eso sí: la paz que da comprarse un libro, ay :')
Pienso lo mismo que tú sobre esta novela: es un puente. De hecho, a medida que la escuchaba - sí, soy un monstruo, pero es que ya sabes la pereza que me da sentarme a leer "físicamente" un thriller JAJAJA - sólo podía pensar en que era casi absurdo que hiciera TANTAS referencias a sus primos. Ojo, me parecía estupendo si no quedara forzado, porque, claro, si hay un hueco de información tan grande entre Quebert y los Baltimore, está más que cantado que quiso arreglar la laguna. De Quebert en la historia... tal cual. Creo que te lo comenté por what's (de hecho, es que seguro que lo hice JAJAJA), pero, en fin, me resultó súper ridícula la escena en la que sale. No me cuadró, no con el personaje que conocimos, al menos ^^"
Centrándome un poquito en la trama de Marcus, te doy la razón en que hace un equipo muy guay con Perry. Un personajazo, por cierto, ese señor. Es tan huraño y, a la vez, tan cuqui *-* ¿Sabes?, me dio hasta un poquito de vergüenza ajena que los dos se obcecaran tanto en "no mostrarse débiles". Quiero decir, han tenido un montón de momentos chungos entre ellos, se han apoyado en lo bueno y en lo malo y, de repente, los dos se ponen en plan "no, no, todo bien, tío, no te preocupes". De verdad, qué cruz jajajajajaja No, ahora en serio, me encantó el arranque de la novela y, no te voy a mentir, estaba SÚPER intrigada por saber qué iba a pasar con Perry jujujujujujuju
Me ha gustado la reflexión de que es un libro que no apetece, digamos, devorar. Toda la razón. Es más, a mí lo que me pasaba es que una vez dejaba de leer, me daba pereza ponerme a ello de nuevo. Y, sí, era bastante chungo acertar qué había pasado, aunque sí que es verdad que hubo un par de cositas que se olían de lejos. No sé, tía, lo que más "gracia" - en el mal sentido - me hizo fue cómo se comportaron los policías. Era como: really? Uf.
Es verdad que los personajes secundarios no conquistan. Ninguno, además. Es que, tía, ni siquiera los recuerdo - no podría decirte ni un nombre, más allá de Alaska JAJAJAJA - y, sí, juntando esto con lo que comentas un poquito antes: el libro hubiera funcionado mucho mejor de haber tenido menos páginas ^^" De hecho, ¿sabes qué me sobró? El drama con la piloto. No aporta, literalmente, nada a la trama. Sigo sin entender qué pintaba ^^"
Me encanta lo claro que dices que te parece un robo que te cobren 22 euros JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA Yo creo que no leeré esa cuarta parte hipotética. No me quedé con ganas de seguir y, la verdad, creo que hubiera sido mejor dejarlo en el libro de Quebert y pasar a otra cosa ^^" Pero, oye, ya sabes que si al final ese libro existe, quiero que me cuentes T O D O jujujujujujujuju
Me ha encantado la reseña, Omaira :D
¡Un besazo muy pero que MUY grande y feliz miércoles! ^^
¡Hola, Carmen! Tranquila, a mí se me acumulan publicaciones, mensajes y entradas por todos lados, así que te entiendo xD
EliminarAy, Carme, yo sabía que tu ausencia de comentarios entusiastas era porque tampoco te estaba gustando mucho, cosa que no me sorprendía porque, en base a lo que yo llevaba leído, ya sabía que éste no era la 8º maravilla. Y quería adorarlo, de verdad que sí, para poder reconciliarme con Dicker y sus últimos fiascos, pero... vale, aunque me haya gustado, me ha parecido un libro más, nada extraordinario.
Mucha gente dice que le gusta más el estilo de los Baltimore, así que por eso no me atrevería a decirte que tú lo odiarás. En mi caso, es que siempre busco más "acción" y ése no la tiene...
Agapea me envía mensajes semanales para que opine de libros que les he comprado... y yo "ummm.... a ver, ¿cómo os explico que no los he leído todavía? x" Pero sí, sí, da paz comprarlos, es como si pudieran desaparecer si no los adquirimos de inmediato xD
Sí, me comentaste lo de Quebert jajajaj Es que es ridícula su aportación, igual que lo que dices de los primos. En Quebert no pensó en ellos ni de refilón y aquí de repente no puede parar de pensar en esos y dar a entender que eran muy unidos... y ya te digo que no es así, entre ellos sí, pero no con Marcus... Le ha quedado un libro-puente chapucero.
Perry es un buen personaje, creo que su punto fuerte con Marcus es que, incluso en los peores instantes, no llegan a perder del todo el humor ni la camaradería, y eso se agradece a pesar de que, como comentas, parezcan temer mostrar su lado más oscuro o triste.
Totalmente de acuerdo, lo de la piloto y... ¿qué me dices de la película que se iba a grabar sobre el libro de Marcus? Al principio se habla del rodaje y de la expectación y luego no sabemos nada más, Marcus no se preocupa para nada de la adaptación de su libro xD
Yo ya paso, no vuelvo a pagar 22€ por un libro a menos que me haya leído reseñas antes y esté muy convencida de que me gustará... eso o... ¿para qué negarlo? Que sea como el del Príncipe Harry y me pueda la curiosidad por la polémica jajajja
Jjajja, si acierto y Dicker lo publica, o edición de bolsillo (aunque ya esas ediciones están subiendo de precio) o ebiblio, así que ya te contaré qué tal está porque sé que yo sí que lo acabaría leyendo jajajja
Muchísimas gracias por tu pedazo de comentario, y, aunque los thrillers no sean lo tuyo, me alegra que Dicker también te conquistara al menos con el de Quebert ^^
¡Saludos y muy feliz tarde! ;-)
¡Hola, Omaira!
ResponderEliminar1. A ver si lo he entendido bien: este libro sucede entre el de Harry y el de los Baltimore, por lo que hay spoilers de Harry, pero no hay spoilers de los Baltimore, aunque habla de los Baltimore para justificar cosas y que en ese libro tengan más sentido, al mismo tiempo que te prepara para el libro 4. ¿Es correcto? Vaya lío.
2. Ya sabes que tengo muy pendiente el librod e Harry. Algún día caerá. Los demás del autor sí que no me llaman an absoluto, este incluido.
3. Bueno, me alegro de que como mínimo haya sido mejor que el de los Baltimore y que, aunque no ha sido gran cosa, como mínimo no te ha decepcionado tanto.
4. Qué mal que usaran al personaje de Harry para vender la novela si luego no sale más que de forma anecdótica.
5. Como dices parece un libro del montón, ni el misterio de Alaska me llama. Por cierto, ¿por qué de repente investigan de nuevo este caso? Tengo curiosidad, ¿no muere nadie en la novela, solo ese asesinato del pasado? Eso sí me parece raro
6. Pues acostumbrate. Es terrible, pero ahora ese es el precio de media de los libros. Un robo.
7. Otra duda: ¿Alaska tenía una cita pese a tener pareja? Es lo que se entiende por tu párrafo.
8. Si este caso es tan importante para Perry y Perry ya había salido en otras novelas, ¿nunca había mencionado este caso? Raro.
9. Me gusta lo de la dinámica entre los detectives.
10. Uf, esto me recuerda a las pistas inexistentes de "El campamento" por lo de "Hay datos que veo imposible que se puedan intuir porque los personajes implicados saben guardar muy bien sus secretos hasta el último segundo, pero si no fuera por testigos de última hora o por instantes en los que a más de uno le da por abrir la boca y contar lo que anteriormente omitió". Me parece que es alargar la trama por alargarla.
Un saludo de,
una Laura parlanchina.
¡Hola, Laura parlanchina! xD Sí que veo que hoy tenías muchas cosas que decir :o Muchas gracias por el tocho comentario ^^
Eliminar1. Lo has entendido a las mil maravillas :D Es justo eso, si te da por leer los libros, guarda ese párrafo porque explicaría muy bien lo que es éste y lo podrías poner en tu reseña.
2. El libro de Harry es insuperable, tras leer tantos del autor, a mí ya me ha quedado claro que ése es imbatible, no solo por el magnetismo de la historia en sí, sino también porque está escrito de un modo más elegante y poético sin necesidad de ser forzado. El de "La desaparición de..." también me gustó muchísimo, pero el de Quebert es especial. LÉELO DE UNA VEZ xD
3. Eso sí... al menos no tengo que llorar pensando que malgasté completamente el dinero...
4. Amén a eso. Es jugar con el personaje... Para eso, mejor haber hecho directamente un libro posterior a los Baltimore y que ahí el personaje regresara por algún motivo.
5. Muere alguien... es una muerte natural, pero queriendo ahondar en ciertos comportamientos extraños de ese personaje en los últimos meses, pues se topan con que tiene un vínculo con ese caso del pasado.
6. ¿Has mirado los precios de las publicaciones de los próximos meses? Yo sí, y si ya lo de los precios estos me impactaba, lo de las ediciones en bolsillo me ha dejado muerta. Ahora están a 10,40 los nuevos lanzamientos de ese tipo, salvo con las ofertas ocasionales de 7,95 (que antes eran 6,95). Pues bien, a partir de mayo... ¿ediciones en bolsillo? ¿qué es eso? Los precios ya son de 12 a 14€, lo cual me parece un robo a mano armada si tenemos en cuenta que, aunque sean pocas, siguen existiendo nuevas publicaciones que en tamaño normal están a 17-19€... así que las ediciones en bolsillo están a punto de costar lo que valía un libro normal. Y que no me hablen de escasez de papel ni tonterías, esto ya es una subida bestial de precios porque sí.
7. Es lo que se entiende y es justo eso...
8. Bueno, Perry en el de los Baltimore no pinta nada, y en el de Quebert es lógico que no lo mencionara porque era algo de su pasado que en teoría estaba muerto y enterrado, así que eso lo entiendo.
9. Es lo mejor :)
10. Pues sí, en este caso no te lo puedo negar, sobran páginas, creo que a Dicker le va publicar tochos y no se dio cuenta de que estaba metiendo más paja de la necesaria...
Lee el de Quebert, por favor, si lo odias me da igual, pero tengo ganas de saber qué piensas ^^
¡Saludos y mil gracias por tu comentario tan enorme y detallado! ;-)