Queen of myth and monsters, Scarlett St. Clair

TÍTULO: QUEEN OF MYTH AND MONSTERS

SAGA ADRIAN E ISOLDE #2

AUTORA: SCARLETT ST. CLAIR

Isolde, newly coronated queen, has finally found a king worthy of her in the vampire Adrian. But their love for each other has cost Isolde her father and her homeland. 

With two opposing goddesses playing mortals and vampires against one another, Isolde is uncertain who her allies are in the vampire stronghold of Revekka.

Now, as politics in the Red Palace grow more underhanded, inexplicable monster attacks plague the villages, and a deadly crimson mist threatens all of Cordova, Isolde must trust in the bond she's formed with Adrian, even as she learns troubling information about his complicated past.

(Portada y sinopsis

de la edición publicada

por Bloom books)

OPINIÓN PERSONAL

Una segunda parte que atrapa tanto como la primera y que solo pierde puntos por la actitud tan irritante de su protagonista. Tras leer Rey de guerra y sangre (reseña aquí) y ver que, de momento, no estaba prevista la traducción de su secuela, decidí adquirirla en inglés. Me asustaba un poco que en inglés se me hiciera más cuesta arriba la lectura, pero, afortunadamente, no fue así. El ritmo tan trepidante de la historia no permite que el interés de la trama disminuya y el lenguaje que se usa es lo suficientemente sencillo como para entenderlo todo a la perfección (solo había palabras concretas que desconocía y que tuve que buscar.  De otras se intuía el significado por el contexto, así que con un nivel medio de inglés creo que podéis leerlo sin problemas).

Como continuación, el libro se dedica principalmente a asentar las bases de lo que será el enfrentamiento final que, inevitablemente, tendrá lugar en Kingdom of spirit and shadows, el presunto desenlace de la trilogía (digo "presunto" porque no he visto confirmado al 100% que esto sea una trilogía, de hecho, se ha anunciado recientemente una precuela: Born of flames and sacrifice. Esta precuela está previsto que salga a la venta en inglés en mayo de 2025). 

En esta entrega, Adrian e Isolde intentan hacer frente a las nuevas amenazas que van surgiendo, pero creo que la desconfianza de ella se acentúa más de la cuenta y eso la hace mostrar actitudes ilógicas e infantiles. Lo positivo es que, a pesar de todo, no pierden su química y no llegan a distanciarse.

La transición entre un suceso y otro es rápida, se siguen dando escenas de pasión que demuestran que el deseo entre los protagonistas no ha desaparecido y se consigue que algunos personajes secundarios aumenten su relevancia. 

Puede que decaiga ligeramente respecto al primer libro, pero logra que sigas queriendo saber cómo acabará todo.

A partir de aquí, mencionaré spoilers de Rey de guerra y sangre, por lo que os recomiendo que no sigáis leyendo si no lo habéis leído.

Después de haber sobrevivido al ataque en el Palacio Rojo y de haber tenido que matar a su padre, Isolde se encuentra en un estado de cierta estupefacción por las traiciones que ha sufrido. Además, haber descubierto que es la reencarnación de Yesenia, la bruja más poderosa que muchos recuerdan, y que Adrian hizo un pacto con una diosa para lograr su regreso, le provoca temor y admiración al mismo tiempo. ¿Será capaz de manejar la magia como Yesenia? ¿Adrian la ama menos que a ella? Sus dudas amenazarán con ser su perdición...

Como pareja, Adrian e Isolde forman un muy buen equipo cuando no están discutiendo. Lo malo es que ella pasa más tiempo enfrentándose a él que intentando entender su punto de vista. 

Es increíble el retroceso que ha dado Isolde como personaje, y lo más llamativo es que aquí debería haber brillado más que nunca mientras se ahondaba en sus capacidades y en el papel que tuvo en el pasado cuando era Yesenia.

Eso sí, no niego que se dio un giro argumental interesante cuando Isolde se vio obligada a aceptar un cambio que no era el que podíamos haber esperado. Entendí su incertidumbre en ese sentido y le vi potencial a sus nuevas circunstancias.

Adrian pierde ligeramente su poderío respecto al libro anterior. Eso sí, tiene la paciencia de un santo a la hora de aguantar los berrinches de Isolde. Le demuestra su amor y su lealtad constantemente, pero para ella nada parece ser suficiente. Isolde le exige cosas una y otra vez sin pensar en las consecuencias para él. Posiblemente, verlo tan condicionado a los deseos de ella es lo que le resta fuerza. Hay un par de capítulos narrados desde su punto de vista y hubiera deseado que fueran más. Daba la impresión de que Isolde era la única que tenía un trasfondo que explorar, pero poco a poco vamos viendo que Adrian todavía tiene secretos que desvelar y que ser un vampiro no es su peor condena. Las revelaciones sobre él son inesperadas y estoy deseando saber cómo evoluciona su situación.

La parte erótica sigue teniendo bastante peso. Personalmente, no me resultó repetitiva ni excesiva. Es más, la atracción incontrolable que hay entre Isolde y Adrian es la clave para que nunca lleguen a alejarse el uno del otro a pesar de las dudas. Puede que suene mal, pero después de acostarse es cuando más hablan y cuando están más receptivos a escuchar lo que a cada uno le molesta. 

Hay otras parejas secundarias que también intentan brillar, lo que pasa es que la autora las mantiene totalmente relegadas a un segundo plano. Sorin y Daroc apenas comparten escenas juntos, se vislumbra brevemente cómo surgió lo suyo, pero es algo que pasa sin pena ni gloria porque no se nos enseña realmente cómo le hicieron frente a la gravedad de algunos actos. 

Killian es quien que me sorprendió muy positivamente, ya que en la novela anterior era un aguafiestas que solo sabía intentar reclamar a Isolde como suya. Lo que pasó con el padre de Isolde cambió su forma de ser y aquí se muestra como alguien leal y sensato. Analiza los hechos que se van dando e incluso es un buen consejero para Isolde, pues no le da la razón en todo y procura que no sea tan temeraria. Su aumento de protagonismo no desentonó y lo que me dio pena es que no se nos permitiera ver bien su vinculo con otros personajes. 

Dioses vengativos, brujería, traumas del pasado, muertes y amor son los ingredientes principales del libro. El que flojea más es el de la brujería, aunque admito que yo en diversas obras he tenido problemas con este asunto porque casi siempre me da la impresión es que se basa en recitar palabritas y ya está. Y en este caso no ha sido diferente, ya que seguimos sin saber demasiado del aquelarre original y lo poco que hace Isolde relacionado con este tema no parece tener mucha complejidad.

Me costaba parar de leer y considero que no es una mala continuación. Lo que falla es que, en vez de fortalecerse, la unión de los protagonistas se debilita. En el último tramo es donde más acción hay porque varios personajes demuestran que sus intenciones no eran exactamente las que parecían. Y hay un último descubrimiento que me genera suspicacia. No me lo vi venir, pero no sé exactamente qué puede aportar de cara al futuro. Le voy a dar el beneficio de la duda.

Ahora me toca esperar pacientemente a la publicación de Kingdom of spirit and shadows. Si no hay cambios, saldrá a la venta en inglés en junio de 2025, y tengo claro que lo compraré de inmediato.

Valoración del libro: 7/10 "Isolde y Adrian vuelven a lograr transmitir la pasión que sienten el uno por el otro, pero las dudas y las exigencias de ella debilitan su vínculo. Los acontecimientos se suceden uno tras otro sin descanso y vamos viendo que varios personajes esconden muy bien ciertos secretos. Decae un poco respecto al libro anterior por la actitud de Isolde y por lo poco que para mí aportaron algunos detalles relacionados con la brujería, pero te deja con unas ganas enormes de saber cómo continúa la historia".

Saga Adrian e Isolde

Precuela: Born of flames and sacrifice (a la venta en inglés en mayo de 2025)

1. Rey de guerra y sangre (King of battle and blood) (reseña aquí)

2. Queen of myth and monsters

3. Kingdom of spirit and shadows (a la venta en inglés en junio de 2025)

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