TÍTULO: LA LEYENDA DEL HIGHLANDER
SERIE MEDIEVAL #1
AUTORA: ANNE MARIE WARREN
Kennan MacKenzie jamás hubiera imaginado que una extraña mujer cautivara su solitario corazón, pero su amor le fuera prohibido al ser la prometida de un hombre misterioso.
Una novela de fantasía, romance y aventura, donde dos amantes son obligados a permanecer unidos pero sin poder amarse, y donde lo irracional es su única esperanza.
OPINIÓN PERSONAL
La verdad es que no suelo leer novelas de highlanders, no porque tenga nada en contra, sino porque veo las sinopsis y no me atraen, pero reconozco que las pocas que he leído me han dejado impresiones positivas. En el caso de "La leyenda del highlander", le di una oportunidad porque la autora me ofreció leer una muestra cuando todavía lo estaba escribiendo y me encantó, ya que me sentí cautivada por el romance que presentaba y me causaba curiosidad saber cómo iba a terminar. Ahora que ya la autora lo terminó y lo publicó, me envió la versión final y no me resistí a empezarla casi de inmediato. ¿Me ha gustado? Sí, bastante, aunque hay pequeños detalles que no me convencieron. A continuación, os daré mi opinión, pero antes quiero agradecerle a la autora la amabilidad que siempre tiene cuando hablamos y que me haya ofrecido este libro.
Dicho esto, comienzo haciendo una pequeña presentación de la historia: Alanna es una joven que ha vivido siempre en los bosques junto con otras mujeres, entre las cuales se encuentra su tía Wilda. La madre de Alanna falleció tras el parto, algo que vemos al inicio, y su padre murió poco antes para evitar que la mataran a ella y a Wilda, ya que estaban siendo amenazadas por sus creencias. Una vez hecha la introducción, nos situamos en la Escocia del año 1206 y conocemos a Kennan, el laird o jefe del clan de los MacKenzie, que se encuentra junto a sus hombres buscando a una serie de malhechores que están dejando una huella de destrucción y muerte allí por donde pasan. Lo que Kennan no esperaba era toparse con Alanna, una joven que le deja impresionado y que necesita su ayuda, pues los hombres a los que Kennan busca están atacando a las mujeres con las que vive y ella ha tenido que huir para pedir ayuda. Sin perder el tiempo, Kennan y sus guerreros acuden al rescate y evitan una tragedia, pero para Kennan y Alanna ha sido mucho más, pues en ambos se ha despertado una atracción difícil de parar...
A ver, no penséis que es un amor sin fundamento ni nada, porque no es así y eso me agradó. Kennan ofrece a todas las mujeres refugiarse en su castillo unos días para recuperarse del ataque, y mientras van hacia allí conversa con Alanna de un modo que hace que se note una gran complicidad entre ellos. No es deseo físico a secas, sino que se hacen preguntas, intentan averiguar cosas el uno del otro y no se limitan a tener pensamientos relacionados con la pasión o la atracción.
En esas primeras páginas donde sucede esto, también se descubre que una relación entre Alanna y Kennan es imposible, pues parece que hay una profecía y que cuando Alanna cumpla 18 años, algo que va a pasar en pocos días, deberá contraer matrimonio con un hombre que ha sido escogido por una sacerdotisa para que la ayuda a librar al mundo del mal. Este hombre es Marrok y nadie parece saber mucho de él, pero Alanna deberá ir a su encuentro y convertirse en su esposa. ¿Es Marrok una buena persona? ¿Mantendrán las distancias Kennan y Alanna? Éstas y otras preguntas serán las que se irán resolviendo a lo largo de la lectura.
No os puedo negar que no hay excesivas sorpresas, pero la autora sabe crear un buen ambiente de incertidumbre y no es fácil predecir cómo serán los sucesos finales. Desde el principio podemos intuir que Marrok no será precisamente un santo, pero su forma de aparecer y su objetivo exacto son un misterio. Aún así, es inevitable ir cogiéndole manía incluso antes de que haga acto de presencia.
La parte de romance me pareció bien construida, se desarrolla en relativamente poco tiempo, pero considero que se transmiten bien los sentimientos que surgen entre Kennan y Alanna y lo difícil que es para ellos tomar ciertas decisiones que pueden poner en riesgo sus vidas y las de los que les rodean. Además, en su relación hay respeto y ambos valoran y admiran las cualidades que tiene el otro. Kennan, por su estatus, es alguien acostumbrado a mandar, pero no impone ni se niega a escuchar a los demás, notándose desde el principio el buen corazón que tiene. Alanna es inocente en varios aspectos, pero eso no significa que sea débil, es decidida y tiene unos poderes que usa siempre para ayudar, aunque eso suponga debilitarse (no los detallo porque me parecía desvelar demasiado).
El foco de atención está puesto en los dos, pero los personajes secundarios no están nada mal y juegan buenos papeles, aunque una me sacaba de mis casillas. Wilda es la que es adorable y me gustó el lado cómico que tiene y su capacidad para saber cuándo tiene que desvelar algo y cuándo no.
Como habréis visto, hasta el momento solo he mencionado cosas positivas, pero le voy a restar un poco de valoración al libro y quiero explicar por qué. No puedo entrar en detalles porque eso supondría dar spoilers, pero me decepcionó el modo en que Alanna y Kennan descubrieron algo muy importante relacionado con sus destinos. Lo vi muy sencillo y no me pareció lógico que anteriormente hubieran obviado ese detalle.
A esto le tengo que añadir que me pareció que el último tramo de la novela fue más flojo. Se dan varios sucesos de forma apresurada y me hubiera gustado ver un desenlace con más tensión. A ver, los personajes viven sus momentos más complicados, pero ciertas escenas me hubiera gustado que tuvieran más intriga o que me hicieran sentir más nerviosa o insegura ante lo que iba a tener lugar.
En resumen, es una historia romántica con toques de fantasía que, sin ser perfecta, logra mantener la atención y, al menos en mi caso, me ha dejado una impresión bastante positiva. Y para que no hayan dudas, la autora pone notas algunas notas al pie de página para explicar tradiciones celtas y otros detalles, lo que ayuda a comprender mejor todo lo que se cuenta.
Es el primer libro se la Serie Medieval, pero tiene un final completamente cerrado, pues en los siguientes habrán otros protagonistas y otras tramas.
Inicialmente, fue publicado con el título "La última profecía". En esta publicación de Facebook la autora explica el motivo del cambio de título.
Lo pongo para que así, si os cruzáis con alguna opinión/ reseña de la otra versión, no penséis que son dos obras diferentes.
Valoración del libro: 8/10 "Una historia de amor con toques mágicos que atrapa con rapidez y de la que es fácil disfrutar. Pierde un poco de ritmo en las últimas páginas, pero eso no logra empañar lo ocurrido anteriormente. Si no fuera por un par de detalles, sería un libro perfecto".
Todo lo expresado anteriormente es mi opinión, esto no significa que esté en contra de otros puntos de vista u otro tipo de opiniones. Si queréis preguntar algo o queréis dar vuestra valoración, no dudéis en dejar vuestro comentario, siempre que lo hagáis de modo respetuoso.
A ver, no penséis que es un amor sin fundamento ni nada, porque no es así y eso me agradó. Kennan ofrece a todas las mujeres refugiarse en su castillo unos días para recuperarse del ataque, y mientras van hacia allí conversa con Alanna de un modo que hace que se note una gran complicidad entre ellos. No es deseo físico a secas, sino que se hacen preguntas, intentan averiguar cosas el uno del otro y no se limitan a tener pensamientos relacionados con la pasión o la atracción.
En esas primeras páginas donde sucede esto, también se descubre que una relación entre Alanna y Kennan es imposible, pues parece que hay una profecía y que cuando Alanna cumpla 18 años, algo que va a pasar en pocos días, deberá contraer matrimonio con un hombre que ha sido escogido por una sacerdotisa para que la ayuda a librar al mundo del mal. Este hombre es Marrok y nadie parece saber mucho de él, pero Alanna deberá ir a su encuentro y convertirse en su esposa. ¿Es Marrok una buena persona? ¿Mantendrán las distancias Kennan y Alanna? Éstas y otras preguntas serán las que se irán resolviendo a lo largo de la lectura.
No os puedo negar que no hay excesivas sorpresas, pero la autora sabe crear un buen ambiente de incertidumbre y no es fácil predecir cómo serán los sucesos finales. Desde el principio podemos intuir que Marrok no será precisamente un santo, pero su forma de aparecer y su objetivo exacto son un misterio. Aún así, es inevitable ir cogiéndole manía incluso antes de que haga acto de presencia.
La parte de romance me pareció bien construida, se desarrolla en relativamente poco tiempo, pero considero que se transmiten bien los sentimientos que surgen entre Kennan y Alanna y lo difícil que es para ellos tomar ciertas decisiones que pueden poner en riesgo sus vidas y las de los que les rodean. Además, en su relación hay respeto y ambos valoran y admiran las cualidades que tiene el otro. Kennan, por su estatus, es alguien acostumbrado a mandar, pero no impone ni se niega a escuchar a los demás, notándose desde el principio el buen corazón que tiene. Alanna es inocente en varios aspectos, pero eso no significa que sea débil, es decidida y tiene unos poderes que usa siempre para ayudar, aunque eso suponga debilitarse (no los detallo porque me parecía desvelar demasiado).
El foco de atención está puesto en los dos, pero los personajes secundarios no están nada mal y juegan buenos papeles, aunque una me sacaba de mis casillas. Wilda es la que es adorable y me gustó el lado cómico que tiene y su capacidad para saber cuándo tiene que desvelar algo y cuándo no.
Como habréis visto, hasta el momento solo he mencionado cosas positivas, pero le voy a restar un poco de valoración al libro y quiero explicar por qué. No puedo entrar en detalles porque eso supondría dar spoilers, pero me decepcionó el modo en que Alanna y Kennan descubrieron algo muy importante relacionado con sus destinos. Lo vi muy sencillo y no me pareció lógico que anteriormente hubieran obviado ese detalle.
A esto le tengo que añadir que me pareció que el último tramo de la novela fue más flojo. Se dan varios sucesos de forma apresurada y me hubiera gustado ver un desenlace con más tensión. A ver, los personajes viven sus momentos más complicados, pero ciertas escenas me hubiera gustado que tuvieran más intriga o que me hicieran sentir más nerviosa o insegura ante lo que iba a tener lugar.
En resumen, es una historia romántica con toques de fantasía que, sin ser perfecta, logra mantener la atención y, al menos en mi caso, me ha dejado una impresión bastante positiva. Y para que no hayan dudas, la autora pone notas algunas notas al pie de página para explicar tradiciones celtas y otros detalles, lo que ayuda a comprender mejor todo lo que se cuenta.
Es el primer libro se la Serie Medieval, pero tiene un final completamente cerrado, pues en los siguientes habrán otros protagonistas y otras tramas.
Inicialmente, fue publicado con el título "La última profecía". En esta publicación de Facebook la autora explica el motivo del cambio de título.
Lo pongo para que así, si os cruzáis con alguna opinión/ reseña de la otra versión, no penséis que son dos obras diferentes.
Valoración del libro: 8/10 "Una historia de amor con toques mágicos que atrapa con rapidez y de la que es fácil disfrutar. Pierde un poco de ritmo en las últimas páginas, pero eso no logra empañar lo ocurrido anteriormente. Si no fuera por un par de detalles, sería un libro perfecto".
Todo lo expresado anteriormente es mi opinión, esto no significa que esté en contra de otros puntos de vista u otro tipo de opiniones. Si queréis preguntar algo o queréis dar vuestra valoración, no dudéis en dejar vuestro comentario, siempre que lo hagáis de modo respetuoso.